¡Bienvenidos!

Bienvenidos al estreno de este humilde blog sobre un asunto olvidado y guardado en los más recónditos archivos de nuestra memoria. ¿Os acordáis de esas tardes con sabor a bocata de Nocilla en el que los vecinos del bloque os reuníais en torno a un tablero de Risk? Tardes interminables llenas de tiradas de dados, piques entre amigos (tableros por los aires incluidos) pero sobre todo diversión y risas. Seguro que de aquellos tiempos echáis en falta el tiempo libre que nos sobraba, el pelo que a algunos ya nos falta :), y la experiencia humana que suponía jugar a uno de estos juegos.
¿Qué ha pasado durante todo este tiempo? Los años han visto crecer el auge de otros entretenimientos, la tele, los videojuegos… que han echado tierra sobre el ataúd de nuestro hobbie. Solo algunos fanáticos se aferraban a sus wargames llenos de hexágonos o sus Civilizations llenos de polvo… mientras hordas desertaban hacia el Magic, las miniaturas o el Rol. Todo parecía rodeado menos alguna pequeña aldea germana, donde hace más o menos una década, se sentaron a pensar un momento "¿A ver, que pasa para que nadie quiera sentarse a jugar alrededor de un tablero?". Y se dieron cuenta que aquellos chicos de la "meriendilla" habían crecido: no tenían casi tiempo para jugar, demandaban juegos más inteligentes, menos complejos y que les sirviera tanto para echar unas cervezas con los amigos como para pasar tiempo de calidad con sus hijos.

Y así nacieron los "Eurogames" juegos que se asientan sobre una serie de premisas:

· Cortos, que de tiempo a jugar una partida antes de cenar y otra antes de acostarse prontito
· Fáciles, que tanto el niño pequeño de la casa como el abuelo no les cueste trabajo aprender las reglas
· Profundos, que no se quemen a la primera partida, con muchas posibilidades.
· Instructivos, huyendo del belicismo y potenciando habilidades sociales, de cálculo o memorísticas

¿Imposible? Pues aquellos señores lograron, en mayor o menor medida, aquellos objetivos que se marcaron y los finales del siglo XX vieron nacer la segunda edad de oro del Juego de Mesa…. Salvo que en la pequeña Piel de Toro nadie pareció darse cuenta… pero esa es otra historia que contaremos otro día... (por ejemplo mañana) ;)