Conociendo a Alan R. Moon (II)

Retomamos el artículo sobre Alan Moon. Si en el anterior repasábamos un poco su vida y su iniciación en el hobby ahora vamos a hablar del Moon profesional del medio.

PUBLICAR.

Si os acordáis dejábamos a Alan , tras su paso por Parker Brothers, lanzándose a publicar sus propios juegos. Comienza enviando muchos prototipos a casas alemanas pero sin éxito. Por ello acaba fundando ‘White Wind`, su propia editorial, junto a un amigo agente de diseñadores de juegos. El objetivo es sacar pequeñas tiradas de sus creaciones, unas 2000 copias, con el fin de que empresas más grandes se fijen ellas y le recompren los derechos relanzando a escala masiva. Pero no tuvo suerte y tardó cuatro años en revender el primer juego de ‘White Wind’.
La lección que dice sacar Moon de esta experiencia y el consejo a los nuevos diseñadores es: “no te metas en este negocio, si aun así quieres seguir busca a alguien que ponga el dinero, jamás pongas el tuyo, aAdemás de dinero vas a perder tu tiempo, muchísimo de tu tiempo”. Alan recuerda esta época con gran frustración y por eso dice darle gran lástima ver a nuevas compañías y diseñadores abandonar el negocio o la negatividad de algunos foros de internet hacia autores noveles.

Tras esta etapa, en 1997, Ravensburger decide lanzar una línea de juegos adultos y se pone en contacto con Alan para que dirija las operaciones en los USA. Dice haber aprendido mucho en este periodo ya que describe a los empleados de la empresa alemana como altamente especializados y grandes conocedores de su trabajo. También toma contacto con otro tipo de productos como los puzzles (que venden en enormes cantidades) o los juegos infantiles con los que crecen todos los niños alemanes.
Tras unos cuantos años decide que ha aprendido suficiente y se toma un par de años para enfocarse en el diseño, es cuando comenzarán a llegarle sus grandes éxitos.

DISEÑAR.

El enfoque de sus diseños (a lo largo de su carrera ha realizado alrededor de medio centenar de juegos) es “crear tensión dando muchas posibles elecciones en un turno”. Generalmente considera que con 2 o 3 posibilidades ya es suficiente y que más ralentizan el juego. Todas las decisiones que realiza el jugador deben ser buenas aunque una suele ser la mejor. El diseñador debe aprovechar que el jugador tiende a pensar que el resultado de sus actos es peor de lo que en realidad es y eso crea la tensión. Es importante que el jugador vea fácilmente las implicaciones de sus acciones. También toma muy en cuenta el enfoque alemán de intentar reducir el tiempo de espera entre turnos al máximo. Factores que cree que estropean un juego son la falta de interacción, si el juego es muy largo (con excepciones de juegos en los que parece que el tiempo vuela), los tiempos de espera entre turnos (y es algo que no soporta de muchos juegos abstractos) y si hay poca estrategia o demasiada suerte.

Consejos para diseñadores novatos:
· Diseña por diversión y no abandones tu oficio habitual
· Acostúmbrate a ser rechazado, fíjate en que cosas le gusta a la gente de tus juegos y poténcialas
· Juega todo lo que puedas y estudia la mecánicas, esto marca la diferencia.

Aquí acaba esta segunda parte de artículos sobre Alan Moon, aun me quedan un par de entregas más que iré sacando estos días. No se si este tipo de artículos resultan muy aburridos o demasiado extensos para la gente menos puesta en juegos de mesa. Por eso me gustaría saber vuestra opinión sobre que tipo de cosas os interesan más a todos: artículos, noticias, fichas de juegos... Comentad libremente y... ¡abrazos!